Es tan breve la vida,
y es tan escurridiza la existencia,
que estoy viendo aún el punto de salida,
estando ya, muy cerca de la meta.
Borbota en mis venas tanto pasado,
y es tan vigorosa la propia esencia,
que ya no puedo dar un solo paso,
sin repasar mis huellas.
Es tan corta la vida,
y tan próxima está mi procedencia,
que ya no hay tiempo para las heridas,
ni siquiera ya, para la conciencia.
Pasado y presente cabalgan juntos
—al caballo el jinete sin dar tregua—,
hacia un futuro incierto que presagia,
aires de indiferencia.
Y sin embargo tú…
Me ha gustado mucho, casi puedo verme reflejado…
Me alegro mucho de que te haya gustado, Oscar. Es -como cada una de mis rimas- la expresión de un sentimiento…Gracias, amigo.